SENSACIONES OLVIDADAS

Otra vez he vuelto a buscar el tesoro. Hemos ido pocas veces, no podemos considerarnos expertos, pero es que tiene algo especial, esto del geocaching. Esta semana o la que viene me compraré el gps de montaña, imprescindible para hacer salidas. Estoy deseando. Después de más de 3 meses sin hacerlo, nos volvimos a juntar. "Los sibaritas". Así hemos decidido llamarnos. Un grupo compuesto por 3 matrimonios, 3 pequeñajos, y una peque en camino. Los niños pequeños, no es que ayuden mucho, mejor sería ir solos, pero ellos también disfrutan de la montaña. Ahora estamos descubriendo la capacidad de aguante que tienen....Y la tienen. Mi hija disfrutó mucho señalando cada árbol pintado de blanco y amarillo, ya tiene casi 5 años.

Ahora el clima es estupendo y hay que aprovechar. Era una decisión difícil. Debíamos pensar en los niños. ¿Dónde disfrutarían más? ¿En un día en la montaña, comiendo con las manos sentados en el suelo, caminando por senderos desconocidos, y finalmente encontrando el tesoro.................
O vistiéndoles con trajes solo utilizables esa vez, comprándoles una palma, yendo a la puerta de la iglesia y bendiciéndola?................... Difícil decisión, sí señor.....

Yo lo siento pero es que no puedo con algunas cosas. Ahora he visto unas fotos de ayer, de algunos niños conocidos, de edades comprendidas entre las de nuestros hijos, .... no puedo. Que cada uno haga lo que quiera, sí. Pero no siempre vas a complacer a tus padres ¿no? Mucha gente joven lo hace por la familia. Eso es lo que yo no comparto. Si realmente quieres y te lo crees, adelante. Pero por los demás, no. No siempre hay que pasar por el aro.

Volviendo al tema, pensé que en algún momento me sentiría mal. Supongo que es el miedo a ver si puedo volver a la normalidad total. Creí que acabaría tomando otro paracetamol, y no fue así. Hicimos una gran caminata. Estuvimos todo el día entre un tesoro y otro. Fuimos a una zona de Orrius, entre Vilanova del Vallés y Orrius o algo así. Es muy recomendable para toda la gente que disfruta paseando por la montaña y la gente que tiene un espíritu "algo aventurero". Y no me refiero a tirarse en paracaídas o hacer puenting. También hay cachés (o tesoros) por la ciudad, así que solo hay que disimular un poco, y querer encontrarlo.

Creo que esta vez sí.

Él

No sé si yo habría podido aguantar como él.

Demasiados días, poco tiempo para permanecer. Partirte por la mitad y estar en un sitio queriendo estar en otro. Sin saber exactamente qué es lo que le pasa por la cabeza al otro, si hay mucha preocupación, si hay visión de futuro, si hay desánimo. Cómo comportarse, tener alegría aunque el otro esté enfermo, o sumirse en un agujero para que el otro se desahogue...............Ser el otro tampoco es fácil.

Creo que lo ha llevado bien, muy bien. Ha sabido escucharme cuando tocaba, ha sabido animarme cuando no lo estaba, ha hecho que yo también mirase al futuro, no solo me quedara con el presente que tenía en ese momento, ha sabido no dramatizar, ha sabido concienciarme de lo que había cuando yo me limitaba a pensar que lo mio era fatal....siempre hay que mirar a otros para darte cuenta de lo bien que estás. Es una pena, pero es así. Me ha hecho ver que la vida no se acaba aquí.

He tenido un traspiés, un bache. Un bache del que no hay que quitar ni un mínimo de importancia. Ha sido grave, sí. Pero lo estoy contando aquí, y eso es lo que me vale. Sé que llegará el día en que planee algo con mi familia, salir como antes. Hoy por hoy voy con cuidado pero todo se andará.

Él siempre ha estado ahí. Ha habido momentos en los que he tenido que sacrificar su compañía y cedérsela a otra personilla. Hablo de mi hija. Hemos preferido que él pasase más tiempo con ella, según el momento. La sensación de abandono puede haber estado presente, somos conscientes de ello.

No sé si yo habría estado a la altura. Seguro que yo no habría podido mantener la compostura. Sus momentos habrá tenido, como cualquier ser humano que ve que la persona que tiene al lado, enferma y hay que tomar decisiones desagradables.

Yo siempre digo que una cosa así, te separa para siempre o te une del todo. En estas circunstancias se ve mucho cómo es la gente, el interés, la participación, la disponibilidad, la implicación, todo. Llevamos juntos muchos años, y creo que después de esto, seguiremos muchos más.
Espero que así sea.

LUZ AL FINAL DEL TÚNEL

Parece que las aguas vuelven a su cauce. Todo se está normalizando, YO me voy normalizando.
Después de que me dieran por muerta, de que la gente pensase que tenía un cáncer, (ya se sabe lo que son los pueblos), puedo decir que estoy bien. Ayer tuve visita con el doctor que me operó, y la frase fue: vida normal. El día 8 de Abril empiezo a trabajar. Y poco a poco imagino que iré haciendo las cosas que hacía antes.

Esto ha sido un mal sueño, parecía una película, algo que no va contigo. Depende del momento era así como se sentía. En otros momentos, lo vives en primera persona, claro está. Si no, que se lo digan a mi médula.

Estoy orgullosa de cómo lo han llevado todos. Familia, trabajo... Parece mentira que siga manteniendo mi trabajo. El mismo de antes, que cuando pasó todo solo llevaba 6 meses..... Me he sentido tranquila con la reacción de mi jefe. Ha sido como otro familiar. Me tranquiliza.

Ahora echo la vista atrás y pienso que quizás sí que tengo mucha suerte en la vida. El doctor Arikan, me lo dijo bien claro. No se cansó de decirme que él firmaba para que todo el mundo que se operaba de lo mismo que yo, le pasase igual que a mi. A lo mejor tenía razón y yo me he salvado de algo horrible. Se le ve buena persona al doctor Arikan. Creo que te tiene que apasionar ese mundo para dedicarte a eso, sabiendo que habrá personas que después de pasar por tus manos, no serán las mismas. Tanta responsabilidad...... da hasta miedo. Por suerte yo he vivido la buena cara del asunto, estoy como siempre, solo que tengo una supercicatriz en mi cogote. No sé hasta que punto le debo la vida. Quizá no es tan exagerado, no lo sé. Eso solo lo sabe él.

La cuestión es que esta semana estoy mejor que la anterior, y ya casi estoy al 100%. Quince días para retomar mi rutina, me sentarán bien. Y después..... a disfrutar de la vida como me dijo él.

Yo sigo tocándome la parte derecha de mi nuca, no vaya a ser que se haya hinchado más de lo permisible. Me he librado de una válvula en mi cabolo, espero que sea definitivo.

El tema es que en breve volveré a ser la que era.
Estoy deseando.

UNA PIEDRA EN EL CAMINO

Parecía que la cosa iba bien, pero...... se torció. Las semanas de post-operatorio no fueron demasiado bien. Mi herida no paraba de fugar líquido cefalorraquídeo. Me cosían de nuevo, me recosían, me vendaban la cabeza, una y otra vez...... Con tanta fuga, era de esperar. Se me infectó el líquido, con lo cual he pasado 24 días otra vez ingresada. Tenía un streptococcus pneumoniae, para ser exactos. Nadie sabe cómo llegó allí, ya que es un "bicho" que suele encontrarse en el tracto respiratorio.... Bueno, la cuestión es que llegué a urgencias con infección y con hidrocefalia. Se me acumuló el líquido en la cabeza y no lo expulsaba. Me pusieron un drenaje lumbar para no hacerme una punción diaria. Me sacaban un cuarto de litro diario. Me dijeron que llegaría un día en el que cerrarían el drenaje y si yo no drenaba sola, si mi organismo fallaba, me tenían que poner una válvula.

Pffffffff, me dio un super-bajón. Todo lo que no lloré antes, lo hice ahora. ¿Otra operación? No puede ser....
Al final me he librado de la válvula, mi organismo drena...........de momento. No descarto que en un futuro..... bueno, mejor no pensarlo.

En esta ocasión, debo decir que me encuentro bastante mejor. Estoy más......yo. Me apetece más moverme, aunque sé que no debo forzar. Pero todo pinta bien. Estoy más cerca de recuperar la vida normal. No hago más que pensar que llevo desde el 4 de Enero sin vida. Sin vida social, quiero decir. Ni familia, ni trabajo, ni amigos..... Es algo difícil de explicar. Se escapa. De repente te ves envuelta en una historia que parece increíble, parece que no va contigo.....
Mi médico no hace más que decirme lo afortunada que soy en la vida. Que tengo mucha suerte. Supongo que deberé creerle, ¿cuántos casos habrá visto él? ¿cuánta gente habrá pasado por sus manos? No todo el mundo sale como yo.
En este ingreso conocí gente joven, que no ha tenido la suerte que he tenido yo. Paula, Marta, y personas de las que desconozco el nombre.
Creo que no era mi momento. Habrá un antes y un después de ésto. Aún no ha llegado, porque no he vuelto a la normalidad, pero llegará.
A partir de ahora, pensaré en las palabras de alguien experto. Creeré que soy suertuda.....

Mañana compraré un cupón...........